jueves, 17 de septiembre de 2009

El 33 en su transito

Año 2010

Desafío del número:

Tiempo de corregir los errores del pasado, esta figura hace propicio algo favorable en el sentido de la reconciliación. Se debe actuar de manera juiciosa y con criterio frente a tales hechos, aunque tal vez se produzcan pequeños inconvenientes y roces al querer realizar tal loable tarea.

Dentro de las posibilidades surge y se sugiere que cada acto que precise de una cuota de condescendencia o amabilidad debe ser dada desde el corazón y con la clara intención de saber que eso y solo eso dará a conocer el tipo de persona que se es. Recuerde que en la vida se debe actuar con comprensión y claridad, directo y con carácter, pero nunca perder la ternura.

Si desea salir bien y esta enfrentando un juicio pendiente de la índole que sea todos los indicios, apunta a que las situaciones se resolverán gracias a las acciones bien pensadas y a las ideas determinantes ante las cuales hay que actuar con la suficiente calma y adecuada serenidad. En este periodo toda esta sujeto a su más dedicada forma de entablar una nueva forma de encaminar hacia nuevos horizontes de la vida o que ella depare. Nada puede ser sorteado, todo debe y exige ser vivido.

Hay sensaciones de que todo lo que nos rodea triunfa, incluso los que son mas débiles que nosotros parecen ganar terreno ante lo que para nosotros parece algo imposible. Pero no hay que dejarse llevar por la mediocridad ni menos dejar que lo bueno nos confunda, se ha nacido para lo mejor y eso es lo que requiere grandes esfuerzos de nuestra parte. Cuando nos parece que la mediocridad triunfa, este no es mejor que lo que la hace triunfar y por lo tanto, no llegara más allá.

En tales circunstancias, uno debe fortalecer el espíritu y apartarse de la envidia que nos empobrece, pues sentir envidia del triunfo que les llega a los que nos parecen mediocres o los que son o están equivocados ante nuestro criterio personal, no nos hace mejor que ellos. Por lo tanto, lo más sabio es solo saber esperar con correcta aptitud, que la vida nos conceda lo que nos corresponde, pues quizás el estancamiento esta en mirar el triunfo de los demás y perdernos de nuestro propio centro.

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